Tenemos tendencia a comprar lo nuevo
1- por garantía
2- porque "dura más"
3- porque es "lo último".
Del último punto se encargan los fabricantes, que añaden mejoras marginales que hacen "imprescindibles" los últimos modelos.
En algunos casos, la mejora es obvia: pasar de batería de 500 a batería de 600+ es una mejora a mi juicio irrenunciable (me negué a creerlo en su día, pero lo es).
En otros casos las mejoras son muy subjetivas, afectan a sensaciones en la conducción, pero no aportan una ventaja incuestionable: barras de 38, mulet, 29vs 27... podríamos discutir horas sobre si se nota o no, cuánto y ... al final la respuesta para mí siempre es la misma "depende para quien".
En mi grupeta (y es miembro de este foro) tengo un compañero que a su 27.5 delante, 27.5 detrás con batería de 500 le ha metido un extender donde va el botellín del agua. Feliz como una perdiz, rango extendido hasta donde no llegamos ninguno de los demás, y de coste una fracción de lo que le habría costado cambiar de bici. Por cierto, una bici de marca, con buena geometría, cuadro de carbono, en perfecto estado que costó como 5000 en su día y que ahora no le pagarían ni la mitad.... por ser 27.5, barras de 35, solo 500w, Shimano 8000.... vamos "obsoleta" y por tanto ¿inservible?. Pues si ves la sonrisa de mi amigo en cada ruta, esa afirmación no la harías.
Mis dos eléctricas han sido de segunda mano. Y en las dos he ahorrado algo. Suficiente? para mí si.
Hay mucha gente que compra y luego por las circunstancias de la vida descubre que esto no es lo suyo, por la razón que sea. Es cosa de saber esperar y negociar.... con cabeza. Lo que costó 6000 no vale 4000 a los 10 meses.... puede que al año y medio, pero no antes.
