Bueno.... desde el confinamiento os traslado mi experiencia con la Turbo Levo SL Comp Carbon.
Por desgracia la salida fue tan solo de hora y media porque me pegué una santa ostia que me ha jodido la muñeca.
La salida con configuración de fábrica 30/30 35/60 100/100. Mi compañero de ruta un tipo fuerte (Tanspyr, Titan, Cape Epic, etc,...) con bici convencional.
La primera sensación evidente es que esta bici se puede llevar apagada muchas veces. Rueda de putísima madre. Con unas ruedas más de XC seguro que mucho mejor. La segunda sensación también evidente es que es bastante más ruidosa que mi anterior TL 2017. Bastante más! Lo quiero recalcar. Parece que te persiga un enjambre de avispas. No me gusta nada pero me tendré que acostumbrar.
Una vez en el monte, el empuje del motor para mi es de sobras. No me hizo falto usar turbo en ningún momento aunque lo probé. Hicimos senderos técnicos de subida con inclinaciones respetables, algo de pista también a un ritmo no muy alto (13 km/h de media aprox). Digamos que el ámbito de un ascenso para mi su potencia es adecuada. Había margen para mejorar ritmo, eso si, a costa de mayor consumo. Menos torque que te obliga a decidir bien la marcha adecuada como si de una bici normal se tratase.
Luego vino lo mejor.... el descenso. El primero un descenso ligeramente técnico en el cual su comportamiento me regresó a las sensaciones ya olvidadas de mi antigua Spitfire. La agilidad, la precisión, la velocidad, la diversión fue máxima. Ese es el terreno, creo yo, para lo que está pensada esta bici.
Después una trialera bruta de bajada. Mucha inclinación y escalones considerables. La bici bajó con extraordinaria ligereza. Con la TL 2017 llegaba abajo con brazos y pecho muy cargados. En esta ocasión me recordó de nuevo la Spitfire. Tal fue mi emoción que ya acabándola me pegué un talegazo por fliparme demasiado con una bici cuyo comportamiento es diferente a lo que venía usando. Ojo!! esta bici perdona menos los errores. Que se lo digan a mi costilla y muñeca.
El consumo fue del 30% teniendo en cuenta que en el regreso con la muñeca jodida no escatimé en asistencia. El desnivel acumulado no fue mucho, quizás 500 pero no lo se realmente.
En definitiva, una bici que te exige más pero que no deja de ser eléctrica, te ayuda lo suficiente subiendo y bajando es una maravilla. No la recomiendo para bikers que salen en grupo con ebikers que van a tope con los 500 y pico watios,. Lo peor, el ruido indudablemente.
Ahí queda el tocho.... cualquier duda me preguntáis.